Hoy 11 de septiembre he participado ilusionado y
entusiasmado en la Vía catalana para reivindicar mi derecho a la independencia
de la mano de los líderes que me convencieron para que fuese, enarbolando mi
bandera estelada, y de la mano, codo con codo, junto a quienes han aprovechado su posición
privilegiada de representantes de los ciudadanos utilizando el sentimiento
identitario de la gente con el fin de:
robarnos durante más de treinta años a manos llenas;
malversar el dinero público;
prevaricar;
aceptar sobornos;
enriquecer a sus familiares y amigos;
utilizar nuestro dinero,destinado a pensiones, hospitales y colegios, para mantener su lujoso tren de vida;
utilizar nuestro dinero para propagar desde medios públicos su mensaje político;
discriminar a quienes no han nacido en Catalunya o no hablan catalán;
priorizar los intereses de los bancos y de las grandes empresas por encima de los intereses de la gente;
corromper la administración pública;
regalar argumentos a su pretendidos adversarios políticos de Madrid para que nada cambie;
apoyar con sus votos en Madrid, durante toda la historia de la democracia, las políticas que ejecutaron los gobiernos nacionales españoles de González, Aznar, Zapatero y Rajoy;
consolidar la posición de privilegio de una élite económica y financiera;
ejecutar políticas contrarias al bienestar de la gente y a la protección de los más débiles;
y, finalmente, camuflar, escamotear, disfrazar, encubrir todas estas tropelías y mantener así el poder a toda costa;
Por eso, hoy he madrugado, he comprado el pan, he preparado un buen bocadillo de atún, he cogido mi bandera estelada, me he subido al autobús, he llegado a la Meridiana y, ya en la calle, junto a mis compatriotas, he sonreído satisfecho y he coreado los eslóganes que mis honorables líderes -los que me han traicionado- me han dicho que hay que corear.
robarnos durante más de treinta años a manos llenas;
malversar el dinero público;
prevaricar;
aceptar sobornos;
enriquecer a sus familiares y amigos;
utilizar nuestro dinero,destinado a pensiones, hospitales y colegios, para mantener su lujoso tren de vida;
utilizar nuestro dinero para propagar desde medios públicos su mensaje político;
discriminar a quienes no han nacido en Catalunya o no hablan catalán;
priorizar los intereses de los bancos y de las grandes empresas por encima de los intereses de la gente;
corromper la administración pública;
regalar argumentos a su pretendidos adversarios políticos de Madrid para que nada cambie;
apoyar con sus votos en Madrid, durante toda la historia de la democracia, las políticas que ejecutaron los gobiernos nacionales españoles de González, Aznar, Zapatero y Rajoy;
consolidar la posición de privilegio de una élite económica y financiera;
ejecutar políticas contrarias al bienestar de la gente y a la protección de los más débiles;
y, finalmente, camuflar, escamotear, disfrazar, encubrir todas estas tropelías y mantener así el poder a toda costa;
Por eso, hoy he madrugado, he comprado el pan, he preparado un buen bocadillo de atún, he cogido mi bandera estelada, me he subido al autobús, he llegado a la Meridiana y, ya en la calle, junto a mis compatriotas, he sonreído satisfecho y he coreado los eslóganes que mis honorables líderes -los que me han traicionado- me han dicho que hay que corear.
"Cuando la gente sabe que les estás mintiendo y aún así te creen, entonces les tienes bien cogidos por los cojones"
El senador Roark, de Sin City
8 comentarios:
Ja,ja
Ester
Que te engañen no me hace mucha gracia, porque te aprecio
No entiendo...lo dices por el jaja? Digo jaja porque sé que todo este asunto te resbala y mosquea...
Me decepciona profundamente y me produce un infinito sentimiento de misantropía
Esta entrada me ha traído a la mente a un militar, político, pintor, ideólogo, filósofo, revolucionario y estadista alemán que existió hace no mucho. Allá por 1919 se afilió a un pequeño partido nacionalista. Gran orador y con mucho carisma que aprovecharía la Gran Depresión, el paro y el desencanto de un pueblo en su propio beneficio y así ascender al poder para hacer lo que le viniera en gana.
Un abrazo Pobrecito, :)
Babe, quizás a alguien le pueda parecer exagerada la comparación que haces; incluso muchos podrían llegar a ofenderse, pero la verdad es que la estrategia de adoctrinamiento, seducción y coacción social para conseguir el único objetivo que mueve a estos tipos, que no es más que conservar el poder, es muy similar a la que ejecutó el partido nacional socialista alemán.
Detrás de esas sonrisas y ese pretendido tono demócrata se camufla el odio, la xenofobia y la irracionalidad de los sentimientos patrióticos. Si estás con ellos eres un catalán digno. Si no, no eres más que un españolista (para algunos,de mierda)
¡Salud, Babe!
También irás codo con codo con los que justificaron la masacre de Hipercor. Si alguien no se acuerda de lo que pasó allí, que pregunten a los vecinos.
Totalmente de acuerdo con el comentario de Babe y tu respuesta. De exagerado, nada.
Para que quien no viva aquí: hoy día 11 S no hay otra realidad en los medios catalanes (sobre todo en los públicos) que "la demostración del deseo del pueblo catalán en construir su propio futuro" . ¡Qué hartazgo!
Salud, Niño Vampiro.
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